NAPOLES (2008)


Nápoles era nuestra siguiente excursión, lugar donde volvíamos a parar como en el crucero NCL del 2006, donde en aquella ocasión visitamos Pompeya, y un poco el centro de la ciudad.
Esta vez, después de eliminar la opción de Capri, ibamos a destinar todo el día a descubrir Nápoles a pie, ya que el barco nos dejaba en pleno centro.
Solo bajar y a escasos minutos del Puerto, el primer gran monumento que nos encontramos fue Castel Nuovo, una preciosa fortaleza que mira al mar, con sus torres redondeadas y un acceso a través de un arco del triunfo.
Seguimos avanzando en dirección a las Galerias Umberto, que nos dirigia automàticament a la màgica Piazza Plebiscito, una inmensa plaza con unos edificios espectaculares en todo su perímetro, que hace recordar a la Plaza de San Pedro del Vaticano.



Esta rodeada por el Palacio Real, y por la Iglesia de San Francisco, y es un símbolo de la ciudad de Nàpoles, una auténtica joya. 

Decidimos tomar un descanso en el histórico Gran Cafe Gambrinus, situado justo al lado de la Piazza Plebiscito, decorado de forma exquisita y donde pudimos volver a degustar el mejor cafè que jamás habíamos tomado nunca.

Después de reponer fuerzas nos fuimos a coger el funicular que nos llevaba a Vomero en la parte alta de Nápoles, donde pudimos disfrutar de unas vistas del Vesuvio y de las diferentes islas.
Volvimos a bajar y con un calor inmenso decidimos volver a lo largo de la costa, para así encontrarnos de frente con Castel dell'Ovo, que es una fortaleza rodeada por el mar en un islote, dentro del Puerto Deportivo Borgo Marinari.

Muy cercano, y ya en dirección al Orchestra nos encontramos un Arco del Triunfo de mármol blanco, con una fuente central casi bañado por el mar.
De allí en 5 minutos bordeando el paseo marítimo teníamos nuestra casa flotante

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